UNA REFLEXIÓN PEDAGÓGICA PARA SENSIBILIZAR
La película “Estrellas del cielo
en la tierra” narra la situación de un
niño de 8 años, llamado Ishaan, que
habita en un lugar de la India, junto con sus familia, asiste a la escuela y presenta una dificultad en su aprendizaje
particularmente al leer y escribir, lo
que le genera innumerables problemas con sus maestros y padres quienes
consideran que la inadecuada actitud del niño no le permite avanzar de manera
significativa en su proceso escolar. Por
ello los padres deciden enviarlo a una escuela interna en la que después de
afianzar sus miedos e inseguridades conoce a un maestro que le cambia su
panorama académico y emocional.
La historia presenta como eje
central el problema de dislexia mostrado por Ishaan, cuyo origen es
neurobiológico y se manifiesta por la
dificultad al leer y escribir que para
el caso del niño se hizo evidente al percibir que las letras bailan a su
alrededor sin encontrarles ningún sentido, porque no hay relación entre las palabras y su
significado, confunde e invierte letras en una palabra, mezcla de palabras que
parecen similares, ortografía diferente
al escribir varias veces una misma palabra entre otras dificultades.
Ishaan es un niño soñador,
activo, juguetón, observador incansable
de la naturaleza y su entorno y de ello
se vale para imaginar, crear, interpretar
y aprender, a través de sus diálogos personales, sus dibujos, sus pinturas,
sin embargo es un niño
incomprendido desde el mundo que los adultos quieren configurar para él; sus padres quienes centralizan su formación
en el seguimiento de normas que en últimas den cuenta de buenos resultados
académicos reflejados en el leer y el escribir sin apreciar su sentir; los maestros de la escuela que de manera
evidente reflejan un tipo de educación tradicionalista, con una relación
plenamente vertical entre maestros y estudiantes, una relación de poder
manifiesta por el que enseña, donde los niños de ninguna manera son tenidos en
cuenta desde sus diversas posibilidades de aprendizaje, por el contrario se
espera que todos sigan las mismas directrices, repitiendo comportamientos y
lecciones de manera fiel al texto o al maestro,
el castigo se convierte en medio de disciplina y retomando palabras de
los mismos maestros implicados en la película, “ se educa para formar en la
carrera de la vida para competir y tener éxito por medio de la unidad, la fe y
la disciplina”.
La problemática de Ishaan,
centrada primordialmente en la dificultad para leer y escribir, siendo éstos
los fundamentos para su éxito, según padres y maestros, permite vislumbrar unas concepciones y prácticas pedagógicas existentes
con respecto al aprendizaje y desarrollo del lenguaje, aspectos que valdría la
pena analizar.
Evidentemente en la película la
enseñanza de la escritura, es asumida desde una representación como código de
transcripción gráfico de las unidades sonoras, en la que los estudiantes
simplemente deben reproducir de manera fiel las directrices dadas en métodos
tradicionales que se han creado en la escuela donde se cumplen normas, se siguen estereotipos y se aprende de manera
mecánica, los niños siguen indicaciones
acorde a un modelo pre-establecido sin opción de que exista reflexión sobre lo
que se está aprendiendo. Ishaan no comprende el proceso de construcción y las
reglas de producción del código
convencional escrito que le intentan enseñar de manera lineal, lo que le genera
inseguridad, confusión y poca confianza en sí mismo.
El niño desde su dificultad
relacionada con la dislexia, de manera involuntaria no logra discriminar entre
dos o más formas visuales o auditivas
próximas, ni por supuesto logra
dibujarlas, generando así una evidente dificultad dentro del proceso
lecto-escrito. Ishaan, en medio de su dificultad, al no entender lo que
significa cada letra o palabra, le era imposible comprender indicaciones en
relación con la gramática o la ortografía.
Los maestros en primera instancia, desconocieron por
completo los conocimientos previos que Ishaan poseía, sin tener en cuenta sus
ideas, sus opiniones, sus creaciones o las definiciones que desde su
experiencia tenía respecto al mundo que le rodeaba para configurar su proceso
de lectura y escritura, se desconocieron las formas de representación desde un
significado, que para el caso del niño protagonista de la película procuraba
innumerables situaciones de exploración espontánea que logró al observar y
jugar con su imaginación en su medio natural, evidenciándolas en sus dibujos. Frente a éste desconocimiento
de los saberes previos de los estudiantes por parte de los maestros desde una
postura tradicionalista.
Sin embargo, luego de una visión
desconsoladora, la trama de la pelicula presenta en la vida
de Ishaan, más que una luz de
esperanza, un aporte reflexivo desde lo pedagógico y lo emocional para la labor
del auténtico maestro. A la vida del niño llega un maestro que aunque
provisional, desde el inicio implementa unas prácticas innovadoras en las que
tiene en cuenta la edad y las expectativas del grupo, cantos, bailes, diálogos
libres que le permitieron a los niños expresar su sentir y su saber, con la
posibilidad de explorar también el entorno y favorecer la creatividad;
simplemente manejaba su mismo lenguaje,
de ésta manera descubre la tristeza e introversión de Ishaan. El maestro
Ram Shankar Nikum comienza a afectarse de tal manera por la situación del niño
que indaga y descubre de manera precisa
su problemática, intentando hacer entender a compañeros y a la misma familia la
situación del Ishaan desde un discurso conmovedor pero basado en sustentos
pedagógicos que dieron paso a cambios definitivos.
Su labor de intervención comienza
por descubrir las potencialidades del niño desde la pintura y lo enfrenta
también a su propia realidad ante el grupo, a la aceptación de su condición
desde la disimulada relación de su estado a similitud de grandes personajes de
la historia y del mismo maestro quien también presentó dislexia en su niñez.
Desde allí comienza un camino productivo de reaprendizaje de la lectura y
escritura para Ishaan, donde el maestro desafía al niño a superar sus errores, enfrentándolo a través
de cada actividad planteada.